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El Dr. José Álvarez de Choudens:

Líder médico, Secretario de Salud y pionero en la neurocirugía

La neurocirugía ha sido por décadas una especialidad que destacó con luz propia en el Recinto de Ciencias Médicas y en Puerto Rico en general. Uno de los iniciadores en este campo fue el Dr. José Álvarez de Choudens, quien, junto con el Dr. Nathan Rifkinson, logró la acreditación de la especialidad de neurocirugía. El Dr. Álvarez de Choudens jugó un rol destacado en el Departamento de Salud en una época en la que se contaba con pocos recursos y había muchas carencias. Fue un destacado médico y servidor público, que dejó una huella importante y que sirvió bien a Puerto Rico.


Norman Maldonado, MD

Norman Maldonado, MD
Hematólogo-Oncólogo
Ex Presidente de la
Universidad de Puerto Rico

Sus inicios

José Álvarez de Choudens nació en 1922 en el pueblo de Arroyo, al sur de Puerto Rico. Estudió en las escuelas públicas de Arroyo y Guayama, e hizo los estudios de premédica en la Universidad de Puerto Rico, en Río Piedras. En aquella época había un programa para estudiar Medicina en la Universidad de Maryland para algunos jóvenes talentosos de Puerto Rico que se graduaban de Río Piedras. El Profesor Santana era el consejero que se encargaba de la cuota de estudiantes de premédica y odontología para ser admitidos a Maryland anualmente. Así, José Álvarez de Choudens fue a estudiar a los Estados Unidos y, en 1944, se graduó de Medicina en la Universidad de Maryland. Luego hizo su internado en el Hospital St. Agnes en Baltimore. Estaba culminando la Segunda Guerra Mundial cuando fue reclutado por el ejército de los Estados Unidos y asignado al “19th General Hospital” que estaba en Frankfurt, Alemania.

De regreso en Puerto Rico

El Dr. Álvarez de Choudens regresó a Puerto Rico a inicios de 1947 y comenzó una práctica como cirujano general. Sin embargo, el mismo año decidió regresar al Hospital de la Universidad de Maryland en Baltimore para completar su entrenamiento como neurocirujano, ya que esa especialidad no se ofrecía en la isla. Él culminó su especialidad en 1951. Luego regresó a la isla como el tercer neurocirujano en Puerto Rico. En 1948 había llegado el Dr. Nathan Rifkinson –natural de Alemania, que estudió Medicina en New York– luego de culminar su entrenamiento de neurocirujano en Washington University, en St. Louis. Vino a trabajar con el Gobierno y comenzó a operar en distintos hospitales de la isla y luego fue profesor de Neuroanatomía cuando se creó la Escuela de Medicina de la Universidad de Puerto Rico. El segundo neurocirujano en llegar fue el Dr. Luis Guzmán López, en 1950, luego de especializarse en el New York Neurological Institute.

Cuando llegó el Dr. Álvarez, trabajó en el Hospital de Veteranos –que entonces estaba en San Patricio– y en la Escuela de Medicina, en el Hospital Municipal de San Juan. En 1956, la Marina de los Estados Unidos lo llamó a servicio activo para servir en el Hospital St. Albans en Nueva York. Al volver nuevamente a Puerto Rico, el Dr. Álvarez desarrolló una práctica exitosa en el Doctors’ Hospital en San Juan. En 1960, cuando el Hospital Municipal de San Juan se mudó al Centro Médico, el Dr. Álvarez de Choudens fue nombrado Director del Servicio de Neurocirugía, que contaba con una unidad amplia, pero no del todo equipada. Él mejoró los servicios allí y también continuó con su práctica privada.

Se interesó en el fortalecimiento de la práctica de la medicina desde la Asociación Médica de Puerto Rico, donde siempre fue muy activo y tuvo mucho liderazgo. Fue Presidente de la Asociación en 1968. Además, participó por muchos años en la Junta de Triple S.

La acreditación de Neurocirugía en el Recinto de Ciencias Médicas

El Dr. Álvarez de Coluden fue miembro de la Facultad de la Escuela de Medicina de la Universidad de Puerto Rico. El Dr. Luis Guzmán López había sido Director del Programa de Neurociencias, tratando, infructuosamente durante muchos años, de tener un programa acreditado de residencia en neurocirugía.

En 1970, el Dr. Rifkinson y el Dr. Álvarez de Choudens contactaron al Presidente de la Asociación de Neurocirujanos en la Universidad de Washington y lograron que se enviara una comisión a la isla, que recomendó la gran necesidad de contar con un programa acreditado de residencia en neurocirugía. Así, un comité local eligió al Dr. Álvarez de Choudens como Director de los servicios de Neurocirugía, que fueron acreditados. En 1973, el entonces recién electo Gobernador de Puerto Rico, Lcdo. Rafael Hernández Colón, lo nombró Secretario de Salud. Entonces el Dr. Nathan Rifkinson fue designado como siguiente Director del Programa de Neurocirugía, cargo que mantuvo por casi 3 décadas, hasta el año 2002, tiempo en el que se formaron cerca de 30 especialistas en neurocirugía, de los cuales, cerca de un tercio emigró a los Estados Unidos.

En el Departamento de Salud

Como Secretario de Salud, el Dr. Álvarez de Choudens fue reconocido como una persona muy accesible y dedicada a mejorar los servicios médicos de toda la isla. En esa época había muchas limitaciones y carencias en el campo de la salud en Puerto Rico.

Sobre eso, el Dr. Rifkinson me contó una anécdota cuando yo era Director Médico del Hospital Municipal y él dirigía Neurocirugía. Me mencionó que las facilidades de Neurocirugía estaban sobrecargadas y que él trabajaba incansablemente para conseguir los materiales y equipos necesarios.
Me dijo que siendo tan amigos y colegas de especialidad, el Dr. Álvarez le dio una gran lección cuando le fue a pedir apoyo y más recursos para equipar a la unidad de Neurocirugía del Hospital Municipal en el Centro Médico. Así las cosas, cuando solicitó una cita con el Secretario de Salud, tuvo que esperar meses para que el Dr. Álvarez le diera la cita. Después de un saludo muy cordial, el Dr. Álvarez le dijo al Dr. Rifkinson: “Nathan, yo amo la neurocirugía profundamente, pero en el corto tiempo que llevo aquí he visto niños malnutridos, alta mortalidad infantil, mucha tuberculosis, pueblos sin médicos, cuidado prenatal deficiente, hospitales sin médicos ni enfermeras y esas son mis prioridades ahora”. El Dr. Nathan Rifkinson salió defraudado de la reunión, pero pronto escribió en su libro que el Dr. Álvarez era una persona con muchos retos y sólidos principios. El Dr. Álvarez le siguió asignando a neurocirugía el mismo presupuesto, ni más ni menos.

Cuando me tocó dirigir el Hospital Municipal de San Juan, junto al entonces Director de Salud de la Capital –el cirujano y gran médico el Dr. Luis Díaz Bonnet– visitamos al Secretario de Salud y pudimos apreciar también la dedicación que le dio al Departamento de Salud. Al terminar su nombramiento, él regresó a la Escuela de Medicina y a su práctica privada. Se dedicó a atender a los pacientes con adicción a drogas y a ayudar con crisis sociales.

Comentario

El Dr. Álvarez de Choudens ha sido uno de los médicos neurocirujanos más importantes en la isla, en el ejército de los Estados Unidos y un líder en la medicina en la isla como Profesor en el Recinto de Ciencias Médicas, como Presidente de la Asociación Médica de Puerto Rico, como Secretario de Salud y como líder cívico.

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