Uso concurrente de opioides y benzodiacepinas: el verdadero desafío
En los últimos años han aumentado significativamente las muertes por sobredosis de opioides. Se estima que 1 de cada 3 de estas muertes involucra una benzodiacepina. En Puerto Rico, existe una sobreutilización de ambos medicamentos, pues tan solo en el año 2018 se registraron casi 500 mil recetas de opioides y más de un millón de recetas de benzodiacepinas.
El uso concurrente de opioides y benzodiacepinas puede provocar serias complicaciones de salud, como deterioro cognitivo, somnolencia, caídas, depresión respiratoria, estado de coma e incluso la muerte. Estas son más comunes en pacientes de 65 años o más, grupo que suele utilizar múltiples medicamentos recetados por varios proveedores, lo que dificulta la identificación de la sobreutilización y de los efectos adversos.1
Los benzodiacepinas, incluso en dosis recomendadas, pueden provocar abuso y adicción. Para promover su uso seguro la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) requirió que se le añadiera una alerta (boxed warning).2 Asimismo, el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) publicó guías para evitar la sobreutilización de opioides y reducir su uso con benzodiacepinas.3
Algunas recomendaciones son:
- Utilizar terapias no farmacológicas y/o terapias farmacológicas no opioides;
- Establecer metas realistas y educar al paciente sobre los opioides;
- Utilizar opioides de acción inmediata en lugar de los de acción prolongada;
- Evaluar frecuentemente los beneficios y riesgos de la terapia con opioides; y
- Evitar recetar opioides y benzodiacepinas simultáneamente.
Existen alternativas terapéuticas que pueden ser consideradas para remplazar el uso de opioides y de benzodiacepinas, resumidas en la siguiente tabla :1,4
Los Centros de Servicios de Medicare y Medicaid (CMS) han implementado programas para revisar la utilización de opioides y benzodiacepinas5 para poder identificar pacientes en riesgo y manejar su terapia, y así poder brindar un tratamiento seguro y eficaz. Las guías recomiendan limitar las dosis y duración de las benzodiacepinas, ya sean solas o en combinación, al mínimo necesario para lograr el efecto deseado. Se debe disminuir en forma gradual las dosis para minimizar los síntomas de retirada.6 Para reducir la ansiedad asociada al proceso, se recomienda disminuir los opioides antes que las benzodiacepinas.6
Es importante dialogar con los pacientes sobre los medicamentos controlados, en especial si estos son recetados por diferentes proveedores. Además, se debe reevaluar el progreso del tratamiento, considerar alternativas seguras y descontinuar medicamentos innecesarios. Estas prácticas ayudan a controlar el uso de estas terapias, evitan su sobreutilización y efectos adversos y contribuyen a la seguridad de los pacientes.
Referencias
- CMS 2019. Reduce Risk of Opioid Overuse. MLN Matters SE19011.
- Population Health Management 2020; 23(4): 286-296.
- CDC Guidelines (Opioids). JAMA. 2016 (Aor 29) 315(15): 1624-1645.
- Opioids and benzo-diazepines and overdose. BMJ 2017;356: j760.
- cmit.cms.gov/CMIT_public/ViewMeasure?MeasureId=5887.
- Opioids and Benzodiazepines Just Don’t Mix. South Caroline Healthy Connections, cme-opioids-benzodiazepines-dont-mix, 2018.