Caloría negativa
Caloría negativa es un concepto de uso bastante común en el lenguaje de la nutriología y de los nutricionistas, razón por la que lo traemos a esta sección. Pero, no existen (o no hemos podido encontrar) trabajos serios de investigación científica que lo avalen.La enunciación teórica es sencilla: Si un alimento cualquiera aporta una cantidad de calorías tan baja que resulta inferior a la cantidad de calorías que el organismo gasta para digerirlo y metabolizarlo, entonces ese alimento posee calorías negativas.
El ejemplo ideal sería el agua fría, que aporta 0 calorías y obliga al organismo a gastar cierta cantidad de energía calórica para equilibrar la temperatura de la cantidad de agua ingerida con la temperatura del cuerpo. Otro ejemplo que suele citarse comúnmente es el de las proteínas de buena calidad biológica, que aportan 4 calorías por gramo y necesitan 8 calorías para metabolizarse, lo que nos dejaría un balance negativo de -4 calorías.
Teóricamente, el concepto resulta interesante pero no parece funcionar de forma tan simple: el organismo no puede sostenerse solamente con alimentos que presenten esas características y al mezclarse con otros alimentos se pierde el balance negativo de los mismos.
Las dietas cetogénicas funcionan de esta forma durante un tiempo, pero las complicaciones metabólicas comienzan a aparecer y no son sostenibles por tiempos prolongados. Por otra parte, al incrementar las cantidades –nadie vive con un gramo de proteínas y agua al día– el efecto comienza a ser contrabalanceado por el organismo.
Nuestra conclusión personal al momento actual, y a la espera de investigaciones de más calado, es que no parece razonable sustituir el ejercicio físico y una dieta balanceada y en cantidades adecuadas por un concepto teórico que no ha sido debidamente probado científicamente.