Venciendo los retos
Recuerdo el día en que tomé la decisión de ser médico. Acababa de ver a una joven convulsionando, y yo, que no sabía qué hacer, corrí a buscar a mi padre para pedirle ayuda. Él estaba hablando con un médico, así que ambos corrieron a atender a la joven. Al ver cómo ellos solucionaron el problema, sentí el deseo de aprender a ayudar a los demás de la mejor manera posible. Y desde esa perspectiva, ¡qué mejor manera de ayudar que atendiendo a la salud de los demás!Luego de esa decisión, emprendí la ruta a la Escuela de Medicina. No fue fácil pero la vengo haciendo con el interés de lograr el objetivo que me tracé. Primero, estuve en el Recinto Universitario de Mayagüez de la UPR. Allí, al inicio, hice mi mejor intento por balancear los estudios con mi vida social. Luego, vino el periodo más difícil, que fue antes de que me aceptaran en la Escuela de Medicina.
Al iniciar el segundo semestre del tercer año, decidí tomar el Princeton Review, al mismo tiempo que llevaba 17 créditos de la universidad, la mayoría de ellos con laboratorio. Además, estaba practicando con el equipo de natación. Y para complicar las cosas más, casi pierdo las esperanzas de lograrlo cuando me enteré que el MCAT lo tendría que dar justo en el medio de los exámenes finales.
Pero luego, hice un shadowing con Dr. José I. Almodóvar, especialista en Otorrinolaringología y Cirugía Plástica. Cuando vi todas las actividades que él hace me volvieron las ganas de continuar y de hacer todo lo posible para llegar a mi meta de estudiar Medicina.
Ahora, estoy en la Universidad Central del Caribe en mi primer año de Medicina, me siento feliz y dispuesto a seguir asumiendo todos los retos que vayan surgiendo.